Real Audiencia de  Charcas 

Con el descubrimiento de las ricas minas de plata de Potosí en 1545 y su progresiva importancia económica, la región potosina se convierte en el eje principal del virreinato que comprendía una gran diversidad de ambientes geográficos y de los pueblos. Por la distancia con la capital Lima –la sede del poder virreinal-, surgió entonces la necesidad de crear un nuevo centro administrativo regional desde donde se pudiera controlar con el debido cuidado y atención la zona de mayor producción de plata. Así en 1561 se creó la Audiencia de Charcas instalada en la ciudad de La Plata (actual Sucre). El nombre de Charcas fue puesto por los españoles en honor del pueblo indígena Charca que tanto los colaboraron.

Esta Audiencia nació como tribunal de justicia pero por las necesidades de la vida práctica, abarco también funciones de administración económica y de gobierno. Su jurisdicción, en principio fue demarcada de un modo muy vago a 100 leguas a la redonda de la ciudad de La Plata. En la práctica, durante el siglo XVII el espacio charqueño quedaba delimitado por el Pacifico desde Tacna hasta Antofagasta aproximadamente y al norte a la altura del pueblo pre-hispánico de Ayaviri. En cambio al norte-este y al oriente los límites eran imprecisos por tratarse de territorios de fronteras. Hubo que esperara casi hasta 1700 para que estas regiones fueran incorporadas a la administración española con el establecimiento de las Misiones Jesuíticas de Moxos y Chiquitos (actuales departamento de Beni y Santa Cruz). Con las reformas administrativas hechas por la casa reinante de los Borbones, en 1776 esta Audiencia fue incorporada al recién creado Virreinato del Río de La Plata con capital Buenos Aires.

La audiencia de Charcas ejercito jurisdicción durante los siglos coloniales sobre la mayor parte del territorio de la actual Bolivia, solo con pequeñas modificaciones, además obre los distritos de Tucumán, Paraguay, Buenos Aires, la región de Atacama y la parte sur del Perú hasta el distrito de Puno. Esta demarcación hecha casi sobre las mismas bases de la provincia incaica del Collasuyu, determinara en el siglo XIX el territorio sobre el que se fundaría la Republica de Bolivia.

El 25 de mayo de 1809 se produjo la Revolución de Chuquisaca, que fue un levantamiento popular en el que participaron las autoridades de la Real Audiencia de Charcas en la ciudad de Chuquisaca para destituir al presidente Ramón García de León y Pizarro. La Audiencia se arrogó el mando político y militar. El 30 de septiembre de 1809 el virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros de Buenos Aires designó nuevo presidente de la Audiencia a Vicente Nieto y lo puso al frente de una expedición militar que el 24 de diciembre de 1809 entró pacíficamente en Chuquisaca, finalizando la rebelión.

Felipe Guamán Poma de Ayala


Los conquistadores llegaron a los andes en el siglo XVI y entre ellos algunos se dedicaron a relatar los hechos de las conquistas. Cieza de León describe su actividad: “cuando los otros soldados descansaban, cansaba yo escribiendo ....... escribir”(1541 - 1553). La historiografía ha llamado a estos escritos crónicas, y a sus autores cronistas.

Guamán Poma de Ayala comenzó a escribir su crónica en 1613; tiene la característica de ser una carta dirigida al rey de España, el cree que servirá para enmendar los errores que ve en las relaciones entre españoles e indios: “La dicha crónica es muy útil y provechosa y es buena para enmiendas de vida para los cristianos e infieles para confesarse los dichos indios y enmiendes de su vida y errores, idolatras y para saber confesarlos a los dichos indios y corregidores y padres de dichas doctrinas y de los dichos mineros y de los dichos caciques y demás indios mandoncillos indios comunes y de otros españoles y personas....
Guaman Poma fue un cronista que se reconoce indígena. Es un genuino representante de la forma de pensar de los indígenas de la época y, al mismo tiempo, es sumiso al sistema impuesto por los españoles

Esta dualidad es permanente en su obra pero en un balance ultimo se impone la protesta indígena al espíritu de sumisión. Es duro con la organización colonial y un apologista del imperio de los incas.
Felipe Guaman Poma de Ayala declara “he trabajado de hacer este efecto las mas verdaderas relaciones que se me fueron posibles, tomando las sustancia de aquellas personas; aunque de varias partes me fueron traídas, al fin se reducían todas a las mas común opinión”. El cronista relata también lo que le contaron, después de pasar por el tamiz de la “común opinión”, se cuida en prevenir al lector de las limitaciones de su obra.

En la edición que consideramos, la crónica incorpora 397 dibujos, uno en cada pagina, y el texto escrito comprende 782 paginas. El autor es el que puede expresar de mejor manera el objetivo de sus dibujos en su obras: “...escrito y dibujado de mi mano e ingenio para que la variedad de ello y de la pintura y la invención y dibujo a que vuestra majestad es inclinado haga fácil aquel peso y molestia de una lectura falta de invención y de aquel ornamento y pulido estilo que en los grandes ingeniosos se hallan”. Los detalles del dibujo no haces que no sean simplemente un soporte al texto escrito, sino que dan su mensaje de manera autónoma
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Guamán Poma de Ayala relata en su carta al rey la historia de los incas, la guerra de conquistas y la organización de las colonias; hace una descripción de la situación en ese momento y culmina con las consideraciones.
Las culminaciones son las conclusiones a las que llega y que desea comunicar expresamente al rey para que este las tome en cuenta; son muchas, pero destaca las que defienden los derechos de los naturales a la propiedad de la tierra, la justificación de las creencias religiosas de los indígenas y su conversión al cristianismo. Igualmente no vacila en la admiración a las ordenanzas de Virrey Toledo, denuncia su incumplimiento y, por ultimo, se dirige al rey de esta manera: “ Y así a ves de considerar y acabar con esto. Que no hay encomendero ni señor de la tierra sino somos nosotros propietarios legítimos de la tierra por derecho de Dios y de la justicia y leyes Quitando al rey que tiene derecho, no hay otro español. Todos son extranjeros, MITIMAYS, en nuestra tierra, en nuestro manso y señorío que Dios nos dio. Y considera cristiano.”.